Archivo de noviembre 2006

Arte y Diseño: Ruralmente

Por • 30 de noviembre, 2006 • Tema: Conferencias

En la ciudad de Lugo, organizadas por la delegación cultural de COAG y la Escuela de Arte y superior de diseño “Ramón Falcón”, se celebraron las 2ªs. Jornadas de Arquitectura y Diseño sobre el tema Ruralmente: Nuevos modos de entender lo Rural. Entre los temas tratados en torno a las posibilidades y las nuevas perspectivas de la vida en el campo en armonía con la naturaleza y en simbiosis con el avance de la actualidad, La Tierra: una aproximación a través de la cerámica a nuevos modos de manifestar la creatividad con un material tan rural como es la Tierra ha sido el hilo conductor y enunciado de la 6º y última sesión elegida para cerrar el ciclo de estas jornadas de octubre y noviembre, y en la que Toni Cumella i Vendrell impartió una conferencia exponiendo su singular experiencia relacionada con la cerámica integrada en el medio de la arquitectura. Acto seguido, junto a Toni Cumella, el público asistente pudo participar de una mesa redonda moderada por Francisco Fernández Ares,ceramista y docente en la Escuela de Arte Ramón Falcón (EASDRF), a la que se sumaron otros tres invitados: desde el concepto arte argumentado por sus diferentes experiencias el escultor Caxigueiro (Daniel Río Rubal) y el ceramista José Antonio Sarmiento, artistas ambos relacionados con la «tierra» como materia de sus obras (en el ejercicio del manejo de los 4 elementos de la naturaleza) + el reflejo de su entorno de trabajo (precisamente y no por casualidad en el medio rural dichos autores han ubicado su taller/estudio, en el campo de Galicia y León respectivamente); de otro lado y desde la experiencia de Sargadelos: Andrés Varela Martínez (doctor en ciencia química por la Universidad de Santiago).

Toni Cumella i Vendrell (Granollers, Barcelona;1951)

Tras realizar estudios de ingeniería industrial y fotografía, se ha dedicado por completo a la cerámica desde 1970. Primero como estrecho colaborador de su padre el artista/ceramista Antoni Cumella (1913-1985), referente situado en nuestro país como uno de los nombres fundamentales dentro de la historia contemporánea de la «cerámica de estudio» (de arte). Después, desde 1985, por su trayectoria individual y profesional dentro de la elaboración cerámica enfocada hacia su integración en el marco de la arquitectura en un territorio difícil de clasificar pues se trata de un campo de acción limítrofe con diversas esferas creativas (entre la industria, el diseño y lo artístico), cuyo punto de partida historicamente se sitúa desde referencias próximas a los trabajos «por encargo» del periodo modernista, en el que el alfar se encarga de la resolución técnica y conformación de los elementos cerámicos a la medida de un proyecto específico, en colaboración con un estudio o arquitecto autor del proyecto ofreciéndole a éste la absoluta versatilidad del obrador y la experiencia del ceramista, en este caso Cumella. Por cierto una experiencia que a Toni Cumella le ha llevado a trabajar en colaboración estrecha con importantes estudios de arquitectura (Estudio PER, Cristian Cirici, Pep Bonet, Oscar Tusquets, Steegman y Lluís Clotet. Punto de partida para colaborar con muchos otros arquitectos). De este modo el taller de Toni Cumella ha participado en una parte importante de las obras de restauración del patrimonio modernista de Cataluña (Casa Batlló de Gaudí junto con el arquitecto Josep María Botey; Parc Güell de Gaudí junto a Elíes Torres y Martínez Pepeña, entre otras obras), pero también en nuevos proyectos en los que la cerámica forma parte de la configuración, constructiva/utilitaria/formal/estética de la arquitectura del siglo 21 (por citar alguno de estos trabajos en los que la cerámica es más que ornamentación: El Mercat de Santa Caterina en Barcelona, obra de Enric Miralles y Benedetta Tagliabue; el Pabellón de España de la Exposición de Aichi 2005 (Japón), obra del arquitecto Alejandro Zaera–Polo.

De un extracto sobre la Exposición de Aichi retomamos su enunciado, ya que en este caso también el eje vertebrador para la ocasión fue la Naturaleza:

En esta ocasión, el eje vertebrador de la Expo fue la armonía global, que, bajo el lema de La sabiduría de la naturaleza, trató de reunir todas las experiencias y conocimientos que la humanidad ha adquirido hasta ahora. Los japoneses reconocieron los daños que el desarrollo acelerado ha causado en su propio entorno y propusieron el retorno hacia la naturaleza como fuente de sabiduría por medio de esta Expo, en la que el recinto intentó ser un laboratorio global para preparar un futuro mejor para la humanidad. Las tres áreas temáticas básicas en torno a las cuales se desarrolló la exposición fueron:

– La matriz de la naturaleza: el universo y la tierra imaginados por la humanidad; la comunicación como tecnología del futuro, la experiencia de la humanidad y la ciencia de la vida.

– El arte de la vida: las culturas y su coexistencia con la naturaleza, las artes heredadas a través de los tiempos, la tecnología y la ética en el pasado y en el futuro.

– El desarrollo de eco-comunidades: el desarrollo y preservación de la naturaleza y la recuperación del medio ambiente en el siglo XXI. Propuestas de estilos de vida para el nuevo “ciudadano global” y la construcción de un nuevo sistema social basado en los conceptos del reciclaje y el ahorro de energía.

El Pabellón de Alejandro Zaera-Polo/Toni Cumella sin duda cumplió con dicho «eje vertebrador», más allá de su funcionalidad y en la esfera en que la arquitectura es Arte (de arqkitectum = arte máximo).

Caxigueiro (Mondoñedo, Lugo; 1955)

Su estancia en el Seminario de Estudios Cerámicos (Sargadelos) hace que establezca una especial relación con los materiales cerámicos, presentes en buena parte de a su obra. A partir del año 1990, el escultor va a trabajar más cerca del concepto de «instalación». La narración, la temática social, la utilización del suelo, la presencia de la poesía junto con la mezcla de corrientes tan diversas como el expresionismo, el conceptual y el minimal van ser constantes en su trabajo.

Exposición de Caxigueiro en Galería Bacelos

INSTALACIONES
1990.- «Guerreiros» Museo Pablo Gargallo Zaragoza.
1992.- «Sair, Mudar». Urxencias III, Moaña.
1996.- «O Bosque das Ausencias» Galería Clérigos. Lugo.
1998.- «A linguaxe da memoria» Galería Pardo Bazán. A Coruña.
1999.- «Xeografías» V Foro Atlántico, stand Galería Pardo Bazán.
-«Camuflaxe» Galería Bacelos, Vigo.
2000.- «Tras do Silencio», stand Galería Bacelos (Madrid, ARCO).
-«Linguaxe e memoria», Galería SCQ, Santiago.

EXPOSICIONES INSTITUCIONALES
1993.- «Trazos e Camiños». Itinerante.
1994.- «Escultura Ibérica actual». Itinerante.
1997.- «De Asorey ós 90. A escultura moderna en Galicia» (Auditorio de Galicia).
2000.- «Galicia Terra Única» (Fundación Barrié).
-«Escultura gallega contemporánea. La cerámica como punto de partida». Itinerante.
-«Diálogo co silencio». S. Domingo de Bonaval. Santiago.

BIBLIOGRAFÍA
«Summa Artis». Cerámica Española. Trinidad Sánchez Pacheco.»Enciclopedia Proxecto Galicia», Editorial Hércules. Antón Castro, Severino Penelas.»De Asorey ós 90″ (catálogo) Mª Luísa Sobrino. «Escultura Gallega Contemporánea. La Cerámica como punto de partida». Antonio Garrido. Revista Internacional de Cerámica, etc…

José Antonio Sarmiento (León, 1956)

Maneja hornos de alta temperatura anagama y noborigama. Estos hornos, según el término japonés que así los describe, son vestigio de una tradición alfarera que había finalizado tras el desarrollo industrial, pero que sin embargo el temperamento artístico actual ha regenerado especialmente desde la década de los años sesenta con otro impulso. El contacto y estímulo de la práctica artística fomentada desde la infancia le llevaron sin interrupción en el tiempo a través del dibujo, la pintura y el modelado en arcilla, hasta la cerámica en la que encuentra otros elementos con los que desarrollar su gusto personal por los materiales humildes sin dejar de lado los logros conseguidos. Desde 1980 trabaja a tiempo completo con el barro y el fuego y, tras realizar grandes murales (1985-1996), se interesa por cierta alfarería concentrándose sobre todo durante los últimos diez años en la búsqueda de la auténtica vida de la vasija, cuestionando las fronteras de las disciplinas artísticas desde una visión bastante heterodoxa. En 1988 construye su primer noborigama, en 1999 el prestigioso artista Ryoji Koie se convierte en su mentor y pone a su disposición el estudio de Kamiyahagi (Japón). En el año 2000, nada más regresar de Japón diseña y construye su propio anagama-noborigama. Las hornadas con leña le ocupan de cuatro a siete días (o más) dependiendo de los resultados buscados. El cocer con leña, o el sacar la pieza al rojo, le permite seguir actuando sobre la obra hasta completar todo el proceso, sin abandonarla en ningún momento.

«Esfera» (2005)

El fuego y cómo es aplicado, además de procedimiento para dar consistencia al material, es acción de intervención directa en el soporte de arcilla a la que José Antonio Sarmiento otorga una dedicación eminente e inseparable del proceso creativo completo. El vivir y trabajar en el campo le da las condiciones de espacio, sosiego, contacto con la naturaleza, el tiempo de meditación, que la reflexión de su única y compleja dedicación precisa.



La Cerámica española y su integración en el Arte

Por • 22 de noviembre, 2006 • Tema: Artículos, Exposiciones

Del 8 noviembre hasta 4 febrero 2007
Museo Nacional de Cerámica «González Martí»
Valencia (España)
Comisario: José Miranda

Esta exposición, en palabras de su comisario «ahonda en las claves de la cerámica como material escultórico y su relación con el resto de las artes plásticas, confrontando el trabajo de artistas y ceramistas dentro de una misma estética contemporánea, desde aquellos que abrieron el camino hasta los más actuales». Un total de 137 obras pertenecientes a 64 autores, distribuidas en cuatro espacios del Museo, ofrecen una amplia perspectiva a través de la pluralidad de lenguajes en los que profundiza la cerámica de arte, mediante un recorrido que abarca cronológicamente un periodo de cien años (1902-2005) de creación española contemporánea. En la visita el observador se encuentra con las expresiones esenciales de cada autor, fruto del desarrollo de su concepción escultórica focalmente centrada en el tema o asunto de su interés: la integración arquitectónica, el contenido de la vasija más allá de su conformación objetual, la concepción formal propiamente escultórica y la narrativa puesta en escena a través de la instalación.

Relación de autores y contenidos del catálogo:

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Isamu Noguchi

Por • 17 de noviembre, 2006 • Tema: Artistas

Everything is sculpture, any material, any idea without hindrance born into space, I consider sculpture

Isamu Noguchi

Fueron tres las ocasiones (1930, 1950, 1952) en las que Isamu Noguchi (los Angeles 1904-1988) pasó un tiempo dedicado a la cerámica, siempre coincidiendo con periodos de estancia en Japón. La última y de mayor intensidad tuvo lugar en el año 1952 en la localidad de Kita Kamakura, cuando después de realizar su obra para el Memorial de la tragedia de Hiroshima, aceptó la invitación de su amigo el prestigioso artista-alfarero Kitaoji Rosanjin (1883-1959), quien puso a su disposición: su arcilla, horno y vivienda en una tradicional construcción de 200 años de antigüedad, donde el mismo Noguchi rehabilitó un espacio escavado en la roca que le serviría de estudio -un lugar de austera belleza en el que el artista dejaría su sello- y en el que según sus palabras él y su esposa pasaron uno de los periodos más felices de su vida, mientras se dedicó completamente a la cerámica. Trabajar con arcilla fue para Noguchi un reencuentro repleto de sensaciones que le permitieron conectar con sus raíces japonesas, la casa de su padre (un revivir el inconsciente de la infancia desde la consciencia de adulto; un profundizar en la naturaleza de la materia primigenia): «To exhaust one’s hand in its earth…one has to be a potter», afirmaría.

Esta exposición, comisariada por Bonnie Rychiak (conservadora del museo Noguchi) que hasta el 7 de Enero puede contemplarse en la fundación ICO nos acerca el lenguaje de arcilla de Noguchi: a través de esculturas y objetos (por él denominados simplemente “cerámicas”), fruto de aquellos días felices disfrutando de la asombrosa naturaleza de Kamakura, y de su exquisita sensibilidad manejando los medios y conocimientos de la cerámica tradicional japonesa que a su disposición puso a su alcance la generosidad de Rosanjin (a quien tanto se había acusado de esquivo).

La obra que ahora se contempla en Madrid pertenece a la colección que forma parte de los fondos permanentes del Museo Noguchi en Nueva York, y reúne una selección de cerámicas y testimonios gráficos que recogen una de las más importantes exposiciones que en su día tuvieron lugar en el Museo de Arte contemporáneo de Kamakura. Un acontecimiento que ampliará la comprensión hacia el genio de uno de los más polifacéticos e interesantes artistas del siglo XX. Sin duda una inspiración para la cerámica contemporánea, como tantas veces reconocerían muchos de los artistas-alfareros más innovadores de nuestro tiempo. Entre los que se contaba Kazuo Yagi, quien a su vez fue distinguido con el reconocimiento internacional que le otorgó coloquialmente el sobrenombre de “padre de la cerámica contemporánea en Japón”, y quien nunca dudó, en su modestia, de sentirse agradecido por haber podido contemplar la exposición de Noguchi en Kamakura.



Metamorfosis en Barro: Noguchi en Kamakura

Por • 10 de noviembre, 2006 • Tema: Exposiciones

Exposición:

10 de octubre 2006 – 7 de enero 2007

MUSEO COLECCIONES ICO
(c/ Zorrilla, 3. Madrid. T. 91 420 12 42)

Inauguración: 10 de octubre 2006. Horario: martes a sábado de 11:00 a 20:00h. Domingos y festivos de 10:00 a 14:00h. Lunes cerrado.

Para más información: Lorena Benito (CANO Estudio). M. 646 006 330. T. 91 429 77 74.
E-mail: comunicacion@canoestudio.com

Texto y fotografías: Dossier informativo divulgado por la Fundación ICO

La Fundación ICO presenta Metamorfosis en barro: Noguchi en Kamakura, una selección de las obras cerámicas que el escultor, arquitecto y diseñador Isamu Noguchi (Los Ángeles, 1904-1988) realizó en la villa japonesa de Kamakura en la década de los 50. Por primera vez en Europa, la exposición desvela la poco conocida faceta de Noguchi como ceramista, cuyas esculturas y diseños de jardines y espacios públicos lo convirtieron en una referencia clave en el arte contemporáneo de la segunda mitad del siglo XX.

La exposición del Museo Colecciones ICO reúne una selección de las piezas que se expusieron en el Museo de Arte Contemporáneo de Kamakura en 1952, que recogió más de 130 obras realizadas por el escultor en tan solo cinco meses. “El trabajo cerámico de Noguchi es más bello que la pintura de Picasso”, señalaría el célebre escultor japonés, Kitaoji Rosanjin, tras ver lo que Noguchi había creado. La mayor parte de las piezas que se exhiben en la muestra de la Fundación ICO forman parte de los fondos permanentes del Museo Noguchi de Nueva York.

Isamu Noguchi está considerado uno de los escultores y diseñadores más importantes de la segunda mitad del siglo XX. Su concepto de escultura fue muy amplio y la trabajó de diferentes formas y con multitud de materiales, siempre atento a la búsqueda de su propio lenguaje escultórico.También fue escenógrafo, diseñó lámparas y muebles, jardines, espacios y monumentos públicos, dejando tras de sÍ multitud de obras que ha dificultado la tarea de los críticos de encasillar a Noguchi en un campo artístico concreto.

De madre americana y padre japonés, esta dualidad Occidente / Oriente marcaría su trayectoria y su existencia. Conocido como el padre del primitivismo moderno, Noguchi estaba convecido que a través de la escultura y la arquitectura uno podía entender mejor la lucha con la naturaleza. Su obsesión fue construir un mundo a través del arte tan armónico como el natural, algo muy propio de la filosofía japonesa, y que consiguió a través de sus diseños de jardines, interiores, escenografías y cerámicas.

Isamu Noguchi comenzó su trayectoria experimentando la escultura abstracta, lo que le llevaría a París con una beca del Museo Guggenheim atrabajar con el escultor rumano, Constantin Brancusi. Junto a éste, Noguchi descubriría las Haniwas (antiguas figuras funerarias japonesas), cuya influencia se dejaría sentir años más tarde en la metamorfosis en barro que llevara a cabo en Kamakura. Tras experimentar sin éxito las técnicas de la escultura abstracta, Noguchi decidió buscar su propio lenguaje escultórico. Viajó a Europa, Méjico y Asia, y realizó un viaje fugaz a Japón, el primero después de que abandonara el país la primera vez y que le sirvió de primera toma de contacto con la arcilla. De vuelta a Nueva York, se convertiría en una de las figuras más importantes del panorama artístico internacional por sus trabajos de paisajista, diseño industrial y de interiores, y la producción de esculturas de bronce y piedra.

Después de la II Guerra Mundial, Noguchi volvió a Japón, donde se encontró con jóvenes artistas deseosos de formar parte del optimismo de sus ideas, que pretendían animar al Japón de posguerra a participar en la cultura del mundo occidental. Isamu Noguchi alentó a esta nueva generación de artistas a preservar los valores tradicionales de la cultura japonesa sin dejar de considerar la riqueza de los modelos artísticosprocedentes de Occidente.

Noguchi murió en 1988 dejando tras de sí un inmenso legado de esculturas, jardines y espacios públicos y diseños de mobiliario. Famosas son su Coffee Tabley la serie de lámparas Akari además de los Jardines Japoneses de la UNESCO y el diseño de los puentes para la Paz en Hiroshima, entre otras muchas.

DESCUBRIMIENTO DE LA CERÁMICA

Isamu Noguchi trabajó la cerámica solamente tres veces en su vida, en los años 1939, 1950 y 1952. Las tres veces sería en Japón, país al que tradicionalmente había estado vinculado este material. Noguchi encontró en la cerámica la esencia de la tradición, las técnicas artesanales, la espiritualidad y el contacto con la naturaleza, conceptos muy importantes en la filosofía de vida japonesa y que él había asimilado durante su infancia pasada en el país.

La exposición que tuvo lugar en el Museo de Arte Moderno de Kamakura supuso la culminación de la pasión que Noguchi sentía por Japón y su tradición. La obra cerámica que realizara en la villa de Kita-Kamakura (Kita en japonés significa Norte) se caracterizó por el “descubrimiento como adulto de la naturaleza que había conocido de niño y que prácticamente había olvidado”, señalaría el artista en un ensayo escrito para la exposición.

Los trabajos en barro que Noguchi creó en apenas cinco meses en este idílico rincón de Japón, significaron la consumación de la cerámica japonesa tradicional y de la escultura moderna, que el artista supo unir magistralmente. Las técnicas y los métodos de cerámica empleados por el escultor influyeron, de manera notable, en la obra cerámica japonesa tradicional y moderna.

Muchas de las piezas que se expusieron en el Museo de Arte Moderno de Kamakura representaban motivos caprichosos y con cierto sentido humorístico mientras que otras eran bosquejos de figuras en barro que remitían a imágenes de su entorno campestre, tales como ranas, ciempiés y otros animalillos. Otro grupo lo configuraban piezas que aludían a su mundo más privado, como las representaciones de su esposa y musa, la actriz Yoshiko Yamaguchi, todas ellas conmovedoras y pícaras, amorosas y burlonas. Alrededor de la mitad de los trabajos era platos y cubiertos, tazones de té, fuentes y floreros, recogidos en el folleto que se editó para la muestra como cerámica, diferenciándolos de los trabajos no funcionales a los que agrupó bajo el título general de escultura.

La exposición que presenta la Fundación ICO destaca principalmente las piezas que el artista realizó en los años 50, destacando aquellas que fueron expuestas en el Museo de Arte Moderno de Kamakura en 1952. Además, se mostrarán documentos fotográficos de la exposición de Kamakura así como del lugar donde Noguchi vivió.

RETIRO EN KITAKAMAKURA

Ubicada en la costa japonesa, cerca de Tokyo, Kita Kamakura es una villa exquisita conocida siglos atrás como el centro de la influencia zen en Japón. Con el paso del tiempo se hizo famosa por ser el lugar de retiro de intelectuales además de un lugar turístico donde estaba expuesto el segundo Buda más grande de Japón. Isamu Noguchi viajó a este rincón de la costa japonesa a finales de 1951 y quedó asombrado por su belleza. Allí conoció al famoso alfarero japonés Kitaoji Rosanjin, quien rápidamente trabó amistad con Noguchi, ofreciéndole su casa a él y a su esposa, Yoshiko Yamaguchi.

Yoshiko Yamaguchi y Rosanjin se convirtieron en dos piezas clave de la obra artística que Noguchi realizó en Kamakura. La primera, sirviendo como musa y asistente; el segundo, ofreciéndole a Noguchi sus conocimientos de la alfafería tradicional japonesa además de sus herramientas, como los hornos para cocer la cerámica.

Rosanjin prestó al joven matrimonio una casa de 200 años, al lado de la cual el artista construyó su estudio, cavado en una roca. El sentido de la libertad personal que muestran los trabajos que allí realizara es destacable e iba unido a la libertad vital a la que llegó con el ideal de modo de vida que estableciera en su casa y estudio. Allí abandonaría sus restricciones escultóricas previas y daría rienda suelta a su creatividad.